El entrenador de un grupo de gimnasia recibe un trofeo en el podium y lo celebra lanzando la copa o el trofeo a las chicas del equipo. Hay que decir que el trofeo es metálico y con un pie de mármol. Evidentemente pasa lo peor. Eso pasa por tener a un entrenador pendejo y un equipo igual de pendejo. A quien se le ocurre lanzar un trofeo así y a quien se le ocurre ponerse debajo con los brazos estirados...
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